Nuevos vecinos

Donde vivimos hay mucho cambio de residencia debido a que estamos cerca de varias sedes de empresas y edificios de oficinas. Aunque solo llevamos aquí cuatro años, ya hemos tenido tres familias diferentes como vecinos de puerta. La segunda familia, de hecho, solo estuvo viviendo aquí cuatro meses. Aún nos preguntamos qué pasaría para una aventura tan breve. Pero los últimos sí que tienen pinta de quedarse tal y como están ‘dándolo todo’ con la nueva casa.
Lo cierto es que siempre que hay cambio de vecinos es una cierta molestia para los que vivimos alrededor. Es inevitable porque los recién llegados tienen que colocarlo todo y suelen ser semanas de mucha apertura de puerta. Pero, además, hay vecinos que llegan con ganas de obra, como estos, que nada más aterrizar se pusieron a cambiar buena parte de las ventanas.
Es cierto que las ventanas de este edificio son mejorables y ellos han tenido claro que, desde el principio, quieren otra cosa. Además, han aprovechado los cambios en las ventanas para colocar barras para estores. En el edificio hay como dos bandos: los de las cortinas y los de los estores. Nosotros nos hemos quedado un poco a mitad de camino, somos de ‘centro’. Tenemos alguna habitación con cortinas y otras con estores.
Cuando nosotros llegamos aquí también pensamos en hacer bastantes cambios. Es el entusiasmo de la llegada. Pero, luego, empiezan a acumularse otras tareas y las obras van quedando en el cajón. Pero sí que colocamos también barras para estores en los dos dormitorios y en el despacho porque consideramos que quedarían mejor. Pero para el salón mantuvimos la cortina y la cocina no tenemos ni estor ni cortina, porque en ese espacio tampoco nos preocupa mucho que nos vean cocinar…
Los nuevos vecinos, sin embargo, mantienen el entusiasmo de la llegada y no parar de cambiar cosas. Además de las ventanas, han empezado la reforma de un baño. Toda una fiesta de operarios de aquí para allá, ruidos, polvo y olores sospechosos. Pero así son las cosas cuando llegan vecinos nuevos con ganas de marcha.